Colombia tiene una norma distinta a otros países del mundo, que determina quién o quiénes tienen la obligación de pagar impuestos, especificando el por qué de lo que tiene que pagar. Las políticas internas de cada gobierno y sus economías son las que determinan si se debe o no modificar esta estructura, entonces a esto se le llama “Reforma Tributaria”.



Tributario, se le llama a los impuestos que tanto las organizaciones, empresas, como las personas deben pagar al Estado Colombiano por aspectos diversos, como por ejemplo contratando un servicio, comprando un producto, vivienda o automóvil, o si piensa comprar yate de lujo, la reforma creó mecanismos para reducir hasta en 100% el IVA de yates de más de 30.000 dólares. Los ingresos obtenidos por estos conceptos (impuestos) forman parte de la gran mayoría de los ingresos del país, con los que se realizan inversiones de infraestructura o sociales y además se pagan los gastos administrativos de la nación, empleados y empleadores.



Ahora bien, dependiendo de las características de la Reforma Tributaria, puede cambiar uno o varios aspectos de las leyes tributarias con lo que puede aumentar o disminuir los ingresos que recibe un país por concepto de impuestos, estas características fueron debate a partir de octubre del año 2012 hasta enero de 2013,  en por el cual se reglamentó parcialmente el Estatuto Tributario en el Decreto 0099 del 25 de Enero de 2013.



Cada vez que se lleva a cabo una reforma fiscal en un país o nación como Colombia, hay que considerar que su reforma sea llevada a cabo en forma satisfactoria para que cada uno de los resultados de dicha reforma sean los esperados por todos. El pago de los impuestos no debe jamás ser razón para minimizar el incentivo a las actividades económicas de una nación, deben además adecuarse a las circunstancias económicas de un lugar determinado.

por Estefany Cruz Alonso